Levantando un sueño
El día que dejas tu trabajo para adentrate en una nueva aventura profesional tú sola, realmente no eres muy consciente de todas las cosas nuevas con las que te vas a topar.
Cuando llegas a este punto te sientes quemada, sin vida y estás hasta las pelotas de muchas cosas. Hay algo en ti que te dice a gritos SOLO SE VIVE UNA VEZ.
Quieres vivir trabajando, quieres nuevas sensaciones, riesgo, libertad y lo más importante de todo, quieres pasión en tu día a día. Y sabes que sólo lo vas a conseguir haciendo lo que más te gusta. Así que un día te levantas, te lías la manta a la cabeza y decides cambiar el rumbo de tu vida, porque tú lo vales y porque realmente no sabes cuantos días de vida te quedan.
Cuando haces una locura de estas, más de uno te suelta la típica pregunta de ¿pero cómo vas a vivir de eso? ¿cuanto dinero te queda en tu cuenta bancaria? ¿estás loca?
Antes pensaba que el apoyo de tu entorno era muy importante, pero con el tiempo me he dado cuenta que no sirve de nada. Lo más importante es el apoyo que se da uno mismo todos los días. Es lo único que hace mover tu máquina y tu creatividad.
Cada mes es una lucha, pero una lucha gratificante. Cada vez que vendo una bolsa o alguien me contrata una planificación me llena de una alegría inmensa, porque significa que detrás de todo esto, hay alguien que confía en ti y te apoya…..y para serte sincera….sabes que has conseguido pagarte parte del alquiler por tus propios medios y eso te emociona, aunque no sepas como vas a pagar la otra mitad, pero crees en ti.
Tan sólo daros las gracias a todos los que habéis contribuido ya sea comprando en la shop, viniendo a alguno de los viajes, aconsejando el blog a amigos y propagando la voz.
A quién no voy a dar las gracias es a todos los políticos de este país, que en vez de ayudar a los que intentamos levantar nuestros sueños para generar empleo, lo único que saben hacer es complicarnos más la vida para poder inflar sus maravillosas cuentas bancarias en Suiza.
¡Lucha por tu sueño porque vale la pena!
